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martes, 17 de marzo de 2015

Visita al cementerio de La Almudena

Grande donde los haya, el cementerio de La Almudena es algo parecido a una ciudad de tumbas, donde pasear da una tranquilidad y una paz difícil de explicar.
Esta ha sido mi segunda visita. La planteé rápida, por lo extenso del recinto, y el recorrido fue de la parte más noble, nueva y monumental (diría colosal, titánica) de la entrada, a la más antigua y abandonada, con tumbas rotas y muros apuntalados. Por esta zona hay una puerta de salida que comunica con el cementerio civil, uno de los más famosos de esta España nuestra. El paseo duró algo más de una hora.

La parte noble, bien cuidada, la pasé pronto. Al poco empezó a verse nichos antiguos vacíos e infraestructuras en ruinas. Había escaleras que subían a una especie de colina con varios niveles de enterramientos. Desde allí, en lo más alto del cementerio, pude divisar el horizonte de la ciudad, un contraste llamativo: las tumbas solitarias en primer término sobre el fondo de las Cuatro Torres...


Después de bajar la colina, me interné en la parte más antigua, el abandono y el descuido iba en aumento... ya era hora de buscar la salida y anduve en paralelo al muro cada vez más deteriorado que albergaba gran número de nichos. Estuve entre tumbas infantiles con algunas esculturas de niños con el rostro borrado por el tiempo. Me angustié un poco al no encontrar la salida deseada... sólo tenía que tener de paciencia y andar un poco más...


Inmersa en la maraña de tumbas y de muros apuntalados, llegué a unos antiguos edificios que me indicaban la salida deseada. Me entretuve un poco por la zona y, por primera vez en esta visita encontré gatos, guardianes de mausoleos... los echaba de menos, con son ojos inquisidores mirando fijamente.

Crucé la carretera para entrar en el cementerio civil, un recinto bien cuidado, pequeño, con ilustres habitantes como Pablo Iglesias. Me llamó la atención una placa conmemorando los caídos republicanos de la Guerra Civil y, junto a ella, una rosa deshilachada enganchada en una puerta herrumbrosa.



3 comentarios:

  1. No me pidas nunca que te acompañe en estos paseos... Ays...
    Besotes!!!

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  2. La verdad es que da un poquito de "yuyu", pero mola. Si vas sola te puede ocurrir cosas curiosas...
    En tu compañía prefiero pasear por la playa y las calles gaditanas... Pronto nos vemos.
    Saluditos, Trinita.

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  3. 130años de Cementerio Almudena; 25años privatizados los Servicios funerarios de la EMSF y 7 años de Dragona: Okupación y activismo http://www.nodo50.org/eldragondelaelipa/?p=5363

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