Dos tesoros

Este diciembre y febrero me han traído dos tesoros.
El primero, The End, lo busqué en una gran librería del centro de Madrid, en un día cercano al Fin de Año. El segundo, Mirabilia, apareció en mi mesa de trabajo en torno a una fecha emblemática de febrero.
Hace ya un par de inviernos que mirando libros en la sección de novela gráfica, encontré uno que me llamó mucho la atención: The End de una autora que no conocía. Estudiando su interior caí rendida ante la fuerza y sutileza de su ilustraciones, acompañadas de un relato poético novedoso para mí. No pude comprarlo entonces... pero apunté el nombre de la autora, Paula Bonet, y al llegar a casa busqué información sobre ella y me hice fiel seguidora suya.
Qué hacer cuando en la pantalla aparece THE END es todo un libro de poesía gráfica y escrita, un deleite para los sentidos y los sentimientos. Las nostalgias y los recuerdos de los lugares por donde pasamos, de las personas con las que nos cruzamos en la vida, que aparecen y desaparecen dejando huecos, vacíos...

A través de Paula Bonet conocí a otros artistas como Amaia Arrazola, Chamo San y Conrad Roset.

El segundo libro que apareció en febrero, es Mirabilia de Conrad Roset y Milena Nonó. Está repleto de maravillosas ilustraciones que me sorprendieron gratamente al darme a conocer la sutileza del trazo de Conrad. Es una enciclopedia de musas, de maravillas intangibles que se hacen visibles bajo la diestra mano de Conrad.